¿CUÁLES SON LAS RECOMENDACIONES PARA EVITAR QUE LA EXPERIENCIA SEA DESAGRADABLE PARA EL NIÑO?
Esta terapia puede ser molesta para el niño pues se debe introducir una aguja en los músculos. En ocasiones la postura que deben adoptar para acceder a dichos músculos puede resultar incómoda. Habitualmente es necesario el uso de sedación durante la inyección. Para evitar que la experiencia sea desagradable para el niño y disminuir la ansiedad que pueda pro-ducirle, se exponen las siguientes recomendaciones.
- No engañar al niño acerca del motivo de la visita al hospital: Es mejor que el niño esté preparado y evitar un efecto sorpresa. En menores de 4 años puede decírselo justo antes de llegar al hospital. En caso de ser mayor, 24 horas antes serán suficientes.
- Distraer al niño en vez de tranquilizarlo: El uso de expresiones verbales con intención de tranquilizar tales como “vale”,” tranquilo”, “no pasa nada" aumentan la angustia del niño, mientras que la distracción se asociada a una mayor tolerancia del proceso.
- Usar la música como herramienta: La música suave de fondo (clásica o canciones infantiles) o canciones que ellos mismos elijan pueden disminuir la ansiedad.
- Escenificar en casa mediante el juego: Puede ser útil realizar simulaciones en casa, utilizando juguetes o incluyendo a personajes animados conocidos por el niño y representar situaciones que se producirán en consulta.
- Tener precaución con el vocabulario empleado: se debe evitar el uso de palabras como “doler”, “daño”, “inyección”, “picotazo”, “pinchar”, “aguja”, “avispa”, “jeringa “y se recomienda el uso de palabras como “molestar”, “apretar”, “presión”, “apretado”, “incómodo”.
- Hacer que sea un juego: Ofrecer al niño un juego en un dispositivo electrónico (puzles, construcciones), o una tarea (formar palabras, localizar objetos) no sólo reduce el miedo, sino que mejora la asimilación del procedimiento.